No puedo  decir que Cups & Kids me gusta, y tiene una explicación muy sencilla.

El Viernes por fin des pués de un montón de tiempo, pudimos escaparnos para conocerlo, y la verdad…

No puedo decir que Cups & kids me gustara, más bien ME ENCANTÓ, FASCINÓ, EMOCIONÓ, aunque en parte me entristeció, estábamos solos, un viernes por la tarde… ¿Pero es que nadie sale de sus casas? Con lo fresquito que se está con el aire acondicionado del local y el montón de juguetes que tienen, o ¿ será cosa de las piscinas ?

Nos pedimos algo de chocolate para la operación bikini, y el niño se fue con un carrito a llenarlo de juguetes y pasearlo de un lado a otro de la tienda.

Cuando se cansó, y encontró a Bob Esponja… Madre que cara !!! que gritos !!! jajajaja Estaba ilusionado a más no poder.

Vio los ipad pero no le llamó demasiado la atención, prefería entrar en las casas, buscar por los cajones y trastear con todo lo que encontrara a su paso en cups & kids.

Nosotros pudimos charlar un poco y con el hilo musical tan agradable, pasamos un buen rato. Se veía que han pintado hace no demasiado tiempo, paredes muy blancas y la luz entrando por el patio le daba un tono especial.

Tanto trastear y había que lavarse las manos, el baño por sorpresa limpio. Si ! y ademas adaptado para niños, una mini escalera permite el acceso del pequeño al lavabo facilitando la operación, tienen cambiador, un poco de colonia, muy adecuado.

También tenia ganas de ir por los huertos para casa de grow my first, sabia que los vendían en Cups & Kids aunque igual estaban agotados, también nos enamoramos de la cesta de pic-nic, la cocinita y sus utensilios, los estampadores, los libros y el sin fin de cosas preciosas.

Hablando de libros, en el rincón de los cojines, ideales para una pausa infantil, encontramos unos libros de manualidades la mar de entretenidos, aunque yo pensaba… ¿ y para que huevos ?

Echamos uno ojo a los TALLERES de verano y ACTIVIDADES que realizan, tienen pinta de ser muy entretenidos, ya os contamos lo que hacían para el día del padre

Para cerrar, decir que el trato fue muy bueno y el precio justo para el servicio que ofrecen, hablábamos al salir… ¿Cuanto ha sido? Y la verdad no es el café y la tarta que tomas, es la tranquilidad que tienes, el espacio que el niño disfruta, los juguetes que toca, el tiempo entretenido que te brinda, la oferta de artículos que hay. Eso es lo que pagas, el café y la cookie es solo la excusa.